- Pronto te irás -repitió su padre, sin prestar oído a las palabras de su hijo-. Y quiero advertirte, para que no te sientas sorprendido. Primero, arrancarán tus vestidos, pero no se detendrán ahí. Te despojarán de la última sombra de dignidad que te quede y perderás lo que tú crees que es tu decente derecho a la vida y al respeto ajeno. Te harán vivir, comer, dormir y hacer tus necesidades en compañía otros hombres. Y cuando te vuelvan a vestir, serás incapaz de distinguirte de los demás. No te permitirán llevar ni siquiera un rasguño, ni prenderte una nota en el pecho que diga:
"Soy yo, diferente del resto".
Al Este del Edén - JOHN STEINBECK
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
nada que permita ser diferente. Nada.
ResponderEliminarme gusta este fragmento.
love you my darling